- "Es patético que el alcalde de Vigo desee y manifieste en público su interés porque fracase el proyecto de NGB; es momento de apoyar las gestiones de los directivos para que su proyecto se cumpla y la entidad siga siendo gallega"
- "Que el plan de recapitalización propuesto por el equipo de Castellano tenga éxito es la mayor garantía (si no la única) de que la entidad pueda seguir colaborando en los tejidos empresarial, social y cultural gallego"
El portavoz del grupo municipal del PP, José Manuel Figueroa, ha criticado las "continuas mentiras" del socialista Abel Caballero sobre la fusión de las cajas y calificó de "patético" el interés del alcalde de Vigo porque fracase el proyecto de Novagalicia Banco (NGB), una actitud "mostrada en público con una reiteración totalmente irresponsable". "Caballero se está comportando como un mentiroso patológico incapaz de reconocer que el PSOE aniquiló las cajas de ahorros y que la única opción de Galicia para mantener una entidad propia siempre fue y sigue siendo NGB".Lamentó también que este "deplorable interés" del portavoz socialista por el fracaso de proyectos de alto interés estratégico para Vigo "se repita en otros sectores como el naval, los contratos de Pemex o las gestiones realizadas en Brasil; o en la construcción de equipamientos esenciales como el nuevo Hospital público, la Macrodepuradora o la Ciudad del Mar".
Según Figueroa, "la memoria de los vigueses guardará para siempre la defensa a ultranza hecha por Caballero de los antiguos gestores, que hoy están cuestionados judicialmente; y también sus continuas mentiras sobre el futuro de la caja viguesa". El socialista reiteró hasta la saciedad que Caixanova podía seguir en solitario, cuando el Banco de España obligaba a la entidad viguesa a fusionarse. Llegó a decir que "si Caixanova no sigue en solitario, no me presento a las elecciones". Afirmó después que un SIP era "como una unión temporal de empresas", algo que el propio gobernador del BE se encargó de desmentir en público. Y sigue diciendo ahora que Caixanova "podía haber seguido operando en solitario".
"Fue el Gobierno socialista quien determinó y forzó la desaparición de las cajas", recordó Figueroa. "Fue el Banco de España de Miguel Ángel Fernández Ordóñez quien planteó unas exigencias de capital a las que ninguna de las dos entidades gallegas podía hacer frente. Y también, el que forzó que, para prestarles el dinero necesario, buscasen obligatoriamente una fusión con otras financieras".
Las dos alianzas que exploró Caixanova fuera de Galicia (con Caja Murcia y con Cajastur) fracasaron. Pero de haberse llevado a cabo implicarían hoy que la antigua caja viguesa fuese menos de un 10% de un banco con sede en Madrid e integrado por al menos cinco antiguas cajas (Banco Mare Nostrum o Liberbank).
"La única salida gallega era una fusión gallega", afirmó el líder del PP vigués, "y aunque Novagalicia Banco es hoy una entidad intervenida, tiene gestores gallegos, sede operativa en Vigo, y toma sus decisiones en Galicia". Para devolver el dinero público recibido, sus actuales directivos han presentado un proyecto de negocio con inversores privados que mantendrían los órganos de decisión y las sedes en Galicia. Ese proyecto ha sido definido como viable por el Banco de España y, ahora, también por Bruselas. La Comisión Europea ha abierto un plazo de cinco años para recapitalizar a la entidad. "Es momento de apoyar las gestiones de los directivos para que su proyecto se cumpla y NGB siga siendo gallega", remarcó Figueroa.
La UE fuerza además un adelgazamiento de la entidad que afectará a su cartera industrial y a su expansión fuera de Galicia pero que, por desgracia, tendrá también un coste laboral en la comunidad autónoma. "Desde el PP estaremos vigilantes para que la medida forzada tenga el menor impacto posible en Galicia", dijo. A cambio, la UE obliga a los gestores a volver a los orígenes de las cajas y centrar su negocio exclusivamente en Galicia, Asturias, León y el norte luso, volcándose en los créditos a las pymes y a las familias.
El traspaso de los activos dudosos al denominado 'banco malo' (Sareb), y la nueva inyección de 5.425 millones de euros procedentes de Europa, conducirán a NGB a la rentabilidad operativa desde el mismo año 2013. Estas condiciones son, en esencia, muy similares al Esquema de Protección de Activos (EPA) que el actual responsable del banco, José María Castellano, reclamó al Banco de España y al Gobierno español para captar inversores privados con mayor facilidad. "Es momento de apoyar a estos gestores, desearles suerte y abandonar los mensajes apocalípticos que solo buscan un rédito político cortoplacista", indicó el jefe de la oposición municipal viguesa.
"Que el plan de recapitalización propuesto por el equipo de Castellano tenga éxito es la mayor garantía (si no la única) de que la entidad pueda seguir colaborando en los tejidos empresarial, social y cultural gallego, aunque nunca se regrese al nivel de participación que tuvo en su día la antigua obra social de las cajas", precisó Figueroa.
El líder popular invitó al alcalde a "colaborar con los intereses de Vigo en la búsqueda de una salida viable y óptima para NGB", en lugar de centrarse en sus intereses políticos de aludir al presidente de la Xunta como responsable de una situación "heredada en gran medida por las decisiones del gobierno socialista de Zapatero".
Sobre la filtración del Banco de España respecto a una posible intención de venta de NGB, Figueroa recordó que "el rumor sale del que fuera director general del FROB con el PSOE, Mariano Herrera, y ha sido desmentida formalmente por los actuales rectores del BE".
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